EL MUERETÓN, EL PROGRAMA MAS PICUDO DE LA TV MEXICANA

 por Luis Fernando Bolaños

-¡Pinches putitas, arremánguense un poco más los shorcitos a sus nalguitas!- gritó a las bailarinas, el productor del programa televisivo que estaba a punto de salir al aire. –Necesito que pongan cachondo hasta un viejito de noventa años.

-¿Así está bien, osito?- contestó una de ellas mientras doblaba dos tantos más los pliegues de su short de mezclilla, dejando ver las costuras de su bikini.

“Qué nalgas, pero me gusta más la nueva”, pensó el productor al ver a una pelirroja que se ajustaba el top sin importarle que vieran por instantes sus senos. “Es tiempo de cambiar el modelito”.

-¿Cámaras listas?

Todos asintieron.

-¡Hey tú pendejo de la cámara dos, deja de tomarle el culo a la Blanquita!

-Sólo estaba ajustando el lente- contestó apenado el regordete camarógrafo ajustándose una gorra del Cruz Azul.

-¡Puros pendejos libidinosos hay acá, por eso tu pinche equipo no gana ni una puta final. En fin...

-Ya jefe, vale más su úlcera que un pinche pendejo chaquetero- contestó el floor manager.

-¿Y tú, pendeja Speedy Tetas, ya estás lista?- preguntó a la conductora estelar que estaba entretenida en sus redes sociales.

-Si, carajo, pinche neurótico.

-Recuerda que yo soy el que te sacó de la Zona Rosa y soy el que mantiene tus vicios.

-Jefe, estamos sobre tiempo- dijo el floor manager

-5, 4, 3, 2… ¡Estamos al aire!

El telón que cubría el escenario del foro se abrió, las luces se prendieron y las cuatro chicas con sonrisa de oreja a oreja comenzaron a bailar a ritmo de reguetón.

“Pararse, bailar y corear mueretón”, decía el letrero electrónico que estaba instalado por encima del escenario.

-¡Buenas tardes amado público, esto eeeeeessssssss….- gritaba entusiastamente la conductora, al tiempo de mover sensualmente sus caderas.

-¡ El Mueretoooooooooooooooon!- contestó eufórico el público asistente mientras aplaudía intensamente.

-¡Canten conmigo! ¡Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón!.

El público coreaba y bailaba contestando a la conductora. Para ese entonces las cuatro bailarinas bailaban con algunos de los asistentes que no sabían si seguir el candente paso o dar un rapidísimo vistazo a los escotes, aún a costa de ser reprimidos por sus sexis señoras.

¡Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón!.

-Baja la música a fondo y dile a la pendeja que haga la presentación- dijo el productor al floor manager.

-Lindura presenta ya esta cosa.

-¡Buenas tardes amado público! ¡Esto es el Mueretón, el único programa de la televisión mexicana que está con los más jodidos, con los que no tienen, con los que no tienen tarjetas de tiendas departamentales!. ¡Por eso abrimos este espacio para ver quién es más habil para salir de muerto de hambreeeee!- gritó a los asistentes.

-Hazle un medium shot con la cámara tres para que le vean el 38 B- y tengamos en breve patrocinadores fabricantes de lencería. El pendejo de la cámara dos que haga puras tomas abiertas, que se chingue por mirón.

Las bubis de la conductora quedaron de tal forma que quedarían abarcando más de la mitad de millones de televisores del país.

-El Mueretón es un programa donde los concursantes pelearán por el sueño americano. ¡Siiiiiiii, se irán a los Estados Uniiiidooooos!

“Aplaudan, piojosos”, decía el letrero electrónico.

-El público aplaudió y ovacionó a los tres participantes que hacian su entrada.

-Haz el flashback.

El flacucho participante intentó saludar de besito a la conductora, quien hábilmente con un giro de cadera se puso detrás de él, dejándolo con la trompita parada.

-Este es don Anacleto Pérez Pérez, es oriundo de Honduras, país que estimula nuestra economía al brindar mano de obra calificada para nuestros tables daaaaance- dijo mientras que al aire salían imágenes del fulano rascándose los güevos a la puerta de una iglesia.

El público lo ovacionó, mientras él saludaba tímidamente.

-¡Nuestro segundo valiente es de El Saaaalvadooooor, país que proporciona material a los investigadores de culturas juveniles. Bien por él, que es don Epifanio Jiméneeeeeez! Las imágenes de él asaltando por los trenes salieron al aire.

-Qué hombre- dijo la conductora.

La música de reggaeton subió mientras que el concursante tomó de una nalga a una de las bailarinas para refregarla como quiso.

-Vaya que tiene energía este muchacho- dijo sonrojada la conductora.

-Debemos de estar ya en el primer lugar del rating- dijo el floor manager al productor, quien ya se había prendido un cigarrillo.

-¡Y nuestro tercer participante es de Chaaaaapaaaaas!

-Chiapas, pendeja, le corrigieron por el monitor.

-¡Chiaaaaaaaaaaaaaapas! ¡Y es don Butifarra Goloso oriundo del meritito Tonaláaaaaaaaaaa! El representante chiapaneco fue presentado con imágenes de él vendiendo manguito verde en el crucero de la Torre Chiapas.

La música cesó y la conductora se dirigió a los participantes.

-¡Nuestro primer concursante intentará cruzar el país y luego la frontera, yéndose por tramos de ferrocarril vía pacífico y enfrentará peligros como Chahuites, Oaxaccaaaaaaaa! Y luego intentará ir a Estados Unidos, via San Fernando, Tamaulipaaaaaas.

-¿No puedo salir mejor aquí del DF?- contestó preocupado.

-¡Nuestro segundo valiente, viajará metido en trailers que transportan puerco hasta Ciudad Juárez y allí intentará cruzar, no sin antes conocer a las pandillas!

En ese momento aparecieron imágenes de fondo de diversas masacres en Ciudad Juárez. El tipo quiso salir corriendo, pero dos guaruras impidieron su huida.

-¡Y el Chiapaneco lo intentará vía Tijuaaaaaannaaaaaa!

En ese momento aparecieron al aire las fotos de los tres participantes.

-Si usted vota por el del Salvador envíe la palabra MUERE al número 0013 opcion 1; si lo hace por el Hondureño, envíe MUERE al 0013 opción 2; y si lo hace por nuestro paisano a la opción 3.

La música subió y la conductora comenzó a interactuar con el público.

-¡Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón!.

-¡Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón, Muere, mueretón!.

-Los concursantes llevarán cámaras ocultas. ¡Seguiremos pendientes de lo que pasa! ¡Por que el Mueretón es un programa que quiere ver a las familias crecer!

El Mueretón quiere sacar sonrisas al pueblo de México y Centroamérica, para hacer valer nuestra conición de patio trasero de los ganachos.

Continuará...